jueves, 13 de enero de 2011

Por qué la política...

Joaquin Araneda Lira

DCU de la Chile

Durante varios años en mi vida me pregunté por qué es importante la política, y en que me afecta a mí. Como muchos, mi primer acercamiento fue a través de la televisión; de los debates, elecciones, acusaciones, en fin, todo lo que estamos acostumbrados a ver sobre política en televisión. Observé los aspectos positivos y negativos de la política, vi gente bien intencionada, dedicada a ayudar a las personas, pero otras, al parecer se dedicaban más bien a obtener provechos económicos de su actividad política, más que a vivir con la política, parecían vivir de la política. Esa gente empañaba esta "noble" actividad con actos de corrupción, engaños, negociados, etc. "Serán hechos aislados" pensé en un principio, pero durante los dos últimos dos gobiernos de la concertación aparecieron escándalos como los del MINEDUC, MOP, CHILEDEPORTES, etc. Aquellas calamidades políticas llevaron a que la gente se desinteresara por el tema, es más, recuerdo que un día le pregunté a un amigo si le interesaba el tema, y me respondió "Estás loco, eso me da lo mismo, son puros ladrones, corruptos, etc." Pensé en como rebatirle lo que me estaba diciendo, pero en casi todas sus acusaciones al sistema la verdad es que tiene razón; La política está enferma y necesita ser curada.

Pero hay un punto que me dijo que me parece observable: Me da lo mismo. Aquello manifiesta un pensamiento de que la actividad política no afecta al individúo común, que está muy lejos de desarrollar actividad política. Pero, ¿Es verdad aquello? ¿Acaso la política no afecta al hombre común?
Veamos el caso de un joven de 18 años, estudiante de una carrera "x", que le gusta salir a fiestas, es un día martes y quiere salir a comprar trago a las 2 de la mañana, llega a la botillería y se da cuenta de que está cerrado ¿Por qué? De seguro no porque el dueño quiera tener cerrado. Es porque hay un ordenamiento que obliga a cerrar a las botillerias a tal hora, bajo amenaza de multas si no respeta tal cosa. Me pregunto quien toma la decisión: Una autoridad política. Entonces, vemos como una decisión que toma un político afecta al común de los jóvenes que quiere "carretear" cuando están despreocupados.
Los políticos toman decisiones que afectan, muchas veces, a una gran cantidad de personas, y estas no se da cuenta. El legislador define la política tributaria, y aumentan el impuesto al tabaco, y mucha gente promedio que dice que le da lo mismo la política termina pagando más.
Una persona que fume marihuana, está cometiendo una actividad ilegal, pero perfectamente podría pasar ser legal si las personas con iniciativa parlamentaria más progresistas legalizaran su consumo. Es una decisión que afectaría también al hombre medio.
Vemos como las decisiones que se toman en la esfera política afectan a una gran cantidad de personas, y estas insisten en que les da lo mismo lo que pase en la política. Con lo que señalé queda manifiesto como las decisiones que se adoptan no les debiera dar lo mismo.
Sin perjuicio a lo que señalé, la gente está desinteresada en el tema por todos los problemas que se dan en el sistema, y esto se refleja en la baja de participación en las elecciones, y la poca motivación de los jóvenes en inscribirse en los registros electorales. Lo que considero que es un gran problema Estado por dos razones: la primera, es que las elecciones son el principal medio de control horizontal que tiene la población sobre la clase política, y la segunda es que hacen perder legitimidad al sistema democrático que a nuestros padres les costó tanto volver a establecer.
La política si es importante, por lo que a todos nos debería preocupar como está. Que esté enferma nos afecta a todos: estudiantes, adultos, trabajadores, etc. Si esta enferma, lo que no podemos hacer, y es lo que estamos haciendo, es dejarnos estar, que otros arreglen (¡Pero esos otros están llenos de los vicios que estamos reclamando!). Debemos como población, interesarnos más en el tema, entrar al sistema, y buscar cambiar y arreglar los defectos que tiene. Esto lo hacemos participando en todas las instancias de diálogo y de debate político que el, Estado chileno, entendido como una república democrática, nos ofrece para participar. El llamado es a hacer ciudadanos activos y preocupados de nuestra realidad nacional.

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